
A veces decimos que “tenemos dolor de tripa o dolor de estómago” cuando en realidad lo que nos duele es el colón, pero como no sabemos diferenciar entre un órgano y otro, no identificamos en realidad donde tenemos nuestro problema y qué hacer para solucionarlo, así que a continuación te daré algunas recomendaciones para cuidar tu sistema digestivo y sentirte feliz y con mucho bienestar:
Vamos a comenzar conociendo nuestro intestino
1.Conoce tu aparato digestivo
Comienza en la boca, sigue con la faringe (garganta), le sigue el esófago y luego desemboca en 3 grandes órganos: estómago, intestino delgado e intestino grueso. Y de salida tenemos el recto y el ano.
– Si te duele el estómago seguramente es porque le falta acidez (ph entre 1 y 2).
– Si te duele el intestino delgado es posible que lo tengas permeable por la inflamación.
– Si te duele el colón grueso, podría ser falta de bacterias probióticas que te ayuden a digerir correctamente.

Estos son sólo posibles causas, lo importante es que te aprendas a conocer para identificar dónde está tu inflamación y saber qué digieres y qué no.
2. Toma vinagre de manzana sin filtrar en ayunas
Siempre hay que comenzar por el principio. Si el estómago está mal, los demás órganos digestivos pueden estar mal. Para esto es importante tomar vinagre de manzana sin filtrar (o con madre) todas las mañana en ayunas o antes de cada comida para acidificar el estómago y llevarlo a PH de 1 y 2 que es donde funciona correctamente y produce ácido clorhídrico necesario para digerir, descomponer proteínas y ser barrera contra infecciones.
Preparación: Diluye 1 cucharada en agua caliente o fría y para mejorar su sabor agrega el jugo de ½ limón.

3.Camina de 7.000 a 10.000 pasos diariamente
La actividad física genera energía y ésta es necesaria para activar los movimientos peristálticos del intestino que llevan el alimento de un órgano a otro. Si crees que tu digestión es lenta y no te mueves diariamente, acabas de descubrir la razón. Caminar entre 7.000 o 10.000 pasos al día o hacer deporte ayudará a que tu digestión se haga correctamente.
Otra forma de evitar la inflamación intestinal después de comer, es salir a caminar una vez termines de comer o cenar, tan sólo 10 minutos, esto ayudará a que tengas mejor digestión y que reduzcas los niveles de azúcar en sangre porque serán usados por tus músculos.
4.Comer con mucha ATENCIÓN
Es más importante lo que digieres que lo que ingieres, pues tu cerebro cumple un papel muy importante en tu digestión, ya que es él, el que envía la señal para prender las enzimas digestivas y activar los órganos. Si comes leyendo, viendo la tv o pensando en tu viaje a Tailandia, es muy probable que tu mente también esté allí y no en la comida que estás ingiriendo. Donde pones la atención, pones la energía.
Intenta hacer de tu alimentación un acto sagrado, sin pantallas de por medio, usa los 5 sentidos: huele, saborea, mira los colores, esto te dará saciedad y podrás saber además qué de lo que comes te va entrando bien y qué no.

5.Consumir alimentos mucílagos
Los mucílagos son un tipo de fibra soluble de naturaleza viscosa que podemos encontrar en las semillas de linaza, de chía y en el aloe vera. Entre sus propiedades se encuentra la de desinflamar, regenerar y suavizar las mucosas gastrointestinales. Así que consumirlas dentro de nuestra alimentación se hace indispensable.
Las semillas de chía y de linaza además son ricas en omega 3 desinflamatorio, por tanto, puedes consumirlas en batidos. Aquí te dejo recetas para que sepas como prepararlos.
Si quieres tomar el aloe vera, te recomiendo tomarlo en shot en ayunas por temporadas, especialmente cuando sientas que tiene gastritis o dolor después de comer. Aquí te dejo un link para que veas la receta.

Estos son sólo algunas recomendaciones para comenzar a cuidar tu intestino que seguro te ayudarán muchísimo a mejorar tu digestión y si luego de aplicarlos quieres implementar más, no dudes en contactarme, soy Coach en Cambio de Hábitos con énfasis en nutrición antiinflamatoria y te acompaño a autosanar desequilibrios digestivos con hábitos saludables.
Carolina Escobar
Coach en Cambio de Hábitos